Hidrocefalia en perros
La hidrocefalia es una afección causada por un exceso de líquido cefalorraquídeo que ejerce presión sobre el cerebro. Es una condición que causa una condición grave y resulta en lesiones permanentes o incluso la muerte.
Es una enfermedad que, en la mayoría de los casos, se presenta desde el nacimiento ( congénita ). Varias razas de perros están predispuestas a este trastorno, especialmente las razas pequeñas. Los primeros síntomas suelen aparecer entre los 2 y 4 meses, si no después de unos años.
Los síntomas
Las señales de advertencia de esta enfermedad difieren de un perro a otro. Todo depende de la raza y la forma adquirida de hidrocefalia . Nosotros notamos:
- agresividad
- somnolencia
- ataxia
- ceguera
- fotofobia
- incontinencia urinaria o fecal
- vomitando
- cráneo abultado
- desorientación
- estrabismo
- crecimiento lento
- respiración irregular
- convulsiones
- dificultades de aprendizaje
- un aumento en el tamaño del cráneo
- crecimiento lento
- desórdenes neurológicos ...
Causas
Las causas dependen del tipo de hidrocefalia, ya sea congénita o adquirida posteriormente. Encontramos :
- genética (la hidrocefalia es común en perros pequeños o con cabeza corta)
- hemorragia cerebral en un bebé recién nacido
- deficiencia de vitamina A
- enfermedad inflamatoria intracraneal
- infección cerebral
- Tumor cerebral...
Diagnóstico
Para realizar un examen en un perro con hidrocefalia, existen muchas técnicas que puede utilizar el veterinario . Un ejemplo es la ecografía que permite al médico observar el aumento de tamaño de los ventrículos cerebrales, o el escáner que es la herramienta más accesible y que todavía está disponible en la mayoría de los veterinarios. También hay imágenes por resonancia magnética ( MRI ). Esta sigue siendo la herramienta más precisa y el mejor método para cuantificar y visualizar ventrículos dilatados.
El tratamiento
Los corticosteroides son el salario base en caso de hidrocefalia. Básicamente ayudan a reducir el líquido cefalorraquídeo . De lo contrario, también encontramos inhibidores de la anhidrasa carbónica que tienen el mismo propósito, el de reducir la producción de este fluido.
Para casos severos, se requiere cirugía . Elimina el exceso de líquido y asegura buenos resultados a largo plazo. Es un procedimiento médico delicado y complejo que debe ser realizado por un especialista.
Para los casos más graves, el veterinario puede proponer la eutanasia del perro después del acuerdo de su amo.