5 razones por las que tu perro huele mal

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La secreción de sebo por la piel de los perros es la responsable del olor que olemos en nuestros compañeros de cuatro patas. Sin embargo, este olor puede ser malo, incluso repugnante y podría hacer que su vida diaria sea insoportable.

Varias razones pueden explicar el mal olor que puede provenir de los perros , como determinadas enfermedades dermatológicas, otorrinolaringológicas y anales, o, por supuesto, cuidados higiénicos insuficientes o inadecuados. Pero no te preocupes ! Existen soluciones para remediar el desagradable olor de tu acompañante.

Para ayudarlo con esto, hemos analizado 5 posibles razones para este hecho.

1. Problemas de piel

Estos problemas son comunes en razas de perros con pliegues cutáneos como Shar Pei y Bulldog .

Un olor que proviene de la piel puede deberse a una mala higiene, una infección bacteriana o una alergia. El veterinario podrá ayudarte.

2. Infecciones de oído

Si el mal olor de tu perro proviene de su oído es porque está sufriendo una infección de oído por acumulación de bacterias. Los perros con orejas caídas, como el Basset Hound , tienen mayor riesgo de padecer este problema. Si notas que tu perro se rasca constantemente la oreja y desprende mal olor, considera llevarlo al veterinario, ya que es probable que esto le cause dolor.

Para prevenir estas infecciones, asegúrese de limpiar las orejas de su perro con regularidad .

3. Una cama sucia

Si su perro está muy sano y bien arreglado, pero aún huele mal, probablemente su cama no esté muy limpia. Recuerda limpiarlo con regularidad.

4 una enfermedad anal

Si el olor proviene de los cuartos traseros de su perro, puede deberse a una infección de las glándulas anales (también llamadas sacos anales) o del útero si Esta es una perra que no está esterilizada.

Síntomas como arrastrar los cuartos traseros por el suelo, lamerlos de forma persistente y el picor pueden manifestar esta condición.

5. Flatulencia

Los problemas intestinales pueden provocar la liberación de un gas fétido. Presta atención a la dieta de tu perro y, si persiste, llévalo al veterinario.

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